El 23 de mayo se celebró el día mundial del Melanoma. Es una fecha muy apropiada para esta celebración ya que en estos días todos empezamos a pensar en las playas, en el campo y en las piscinas
Pensamos en lo que vamos a disfrutar con la llegada del buen tiempo, en lo guapos que vamos a aparecer ante el mundo tan morenos y en lo que vamos a presumir a nuestra vuelta de las vacaciones que hemos disfrutado.
En julio tampoco es mala fecha para recordar que también deberíamos pensar en que es una época en la que el sol sigue dañando nuestra piel expuesta. La daña todo el año, pero en verano más. La daña hasta el punto de ser el factor que origina lesiones tan graves como el melanoma, que produce un buen número de muertes al año; unas 7000 en España en 2020.
El tumor es más frecuente en las mujeres que en los hombres, aunque la supervivencia de ellas es mayor. Esto está, casi con seguridad, debido a que ellas se observan con más frecuencia y antes que los hombres, siendo este diagnóstico precoz lo más favorable para la curación.
La supervivencia en general está mejorando, sin duda por la concienciación de la población ante el problema que, mediante la observación de las manchas de la piel, conduce a diagnósticos cada vez más frecuentes en las fases iniciales del tumor.
La mejora en las cifras de supervivencia se debe a una palabra clave: autoexploración. Para el Vocal de Dermofarmacia del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos Tomás Muret
“el control de los lunares, manchas e imperfecciones de la piel por la población, y el pedir consejo a los profesionales de la salud, es fundamental para el diagnóstico precoz de este problema”.
Para tomar conciencia de las posibles consecuencias de la acción del sol sobre nuestra piel, debe saberse que sus efectos son acumulativos: lo que sufre la piel hoy se “suma” a lo que sufre en otros días posteriores, y así sucesivamente hasta que llega un momento en el que el “sufrimiento” produce una lesión.
Las estadísticas indican que las quemaduras solares a causa de los rayos ultravioleta del sol (tan frecuentes en verano) son factores de riesgo del melanoma, y se calcula que prácticamente en el 40% de los niños que se queman frecuentemente en el verano y acumulan después unas cuantas quemaduras más antes de los 20 años, aumenta un 80% el riesgo de que se desencadene un melanoma en la edad adulta.
Sin duda alguna, la exposición premeditada o consciente al sol en “el buen tiempo” incrementa el riesgo de melanoma. Hay, sin embargo, una exposición a los rayos ultravioleta durante todo el año en zonas expuestas sin protección (manos, cabeza, orejas, cuello, escote, empeine) que, con el paso del tiempo, puede ocasionar unas lesiones, en principio, “benignas”; las queratosis actínicas. Estas lesiones, si se padecen con frecuencia, pueden terminar por desarrollar un melanoma.
Para conseguir un diagnóstico precoz del melanoma por medio de la autoexploración, desde tu farmacia se propone que se revisen periódicamente los lunares y manchas por medio de lo que se puede definir como la regla del ABCDE, observando en cada uno de ellos:
Puede haber zonas (espalda, por ejemplo) en las que es difícil realizar una exploración minuciosa y correcta. En estos casos puede recurrirse a la comparación de fotografías de la piel tomadas en momentos diferentes.
Ante cualquier variación de alguno de estos parámetros citados es imprescindible consultar con el dermatólogo. Él puede hacer un diagnóstico precoz y recomendar el tratamiento más adecuado para eliminar el problema.
A pesar de que en nuestra civilización y situación geográfica es casi imposible evitar el sol, si además nos exponemos prolongadamente a sus rayos por cualquier motivo, es imprescindible practicar una fotoprotección correcta para evitar cualquiera de los problemas mencionados. Y para practicar una fotoprotección correcta con cualquiera de los múltiples productos que se ofrecen en el mercado, siempre tienes a tu farmacéutico que te puede orientar sobre cual debes de usar, cuándo y cómo, advertirte de la posible relación del sol con la medicación que puedas estar tomando y resolverte cualquier duda que puedas plantearte. No en vano es el profesional de la salud más cercano que te atiende personalmente, sin esperas, sin cita previa y a la hora que te convenga.